En esta nueva edición del Congreso de Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), la sustentabilidad y la innovación tecnológica de la mano de las Agtech pisan fuerte. En sus primeros paneles los especialistas apuntaron también la trazabilidad y la necesidad de "terminar con las commodities".
Una de las razones es el lema que los convoca en esta oportunidad, "ConCiencia Suelo", como señaló el presidente de la asociación, Alejandro Petek, durante la inauguración: se trata del cuidado del suelo como eje central, apostando a las tecnologías como herramienta clave.
En ese sentido, muchas de los paneles propuestos hablan de ecosistemas tecnológicos, cambio climático, sustentabilidad, integración, agtech e innovación tecnológica como ejes claves en las jornadas.
Uno de los primeros en abrir las propuestas del Congreso fue "Bioeconomía, agtech, trazabilidad: pilares del mundo que se viene", a cargo de Carlos Becco, de Indigo, Martín Hagelstrom, de IBM, Julián Baldunciel, socio de Acronex y referente de Aapresid y Loizeau Laura, de Kynetec como moderadora.
Allí, Loizeau mencionó que en el sector del agro están "acostumbrados a innovar", pero que la velocidad de los procesos es distinta, ya que "los interlocutores y las tecnologías son otras".
Becco, director de Indigo, una startup que lleva dos años operando en Argentina, destacó la importancia que tiene la agricultura a nivel mundial ya que es la fuente del 40% de empleo global, además de ser la fuente que sustenta a todo el planeta.
Sin embargo, disparó que "no tiene ningún futuro si se continúa haciendo las cosas de la misma forma". Señaló que en la actualidad hay menos productores y que un negocio "que expulsa y que no es sustentable es inviable". De este modo, de entrada se posicionó en la idea fuerza que recorre el congreso: la sustentabilidad.
Por otro lado, aseguró que "una agricultura basada en commodities no satisface la demanda de los consumidores".
Respecto del cambio climático, destacó que "la agricultura es un problema", pero que "ya sabemos como detener la degradación". En ese sentido, destacó la siembra directa y la rotación de cultivo.
Además, señaló que desde la startup están comprometidos con las tecnologías limpias (como microbios que reemplacen químicos fertilizantes), en la promoción de la "descommoditización" a través de la digitalización y, finalmente, en sumar trazabilidad y transparencia del productor al consumidor.
"La agricultura en Argentina tiene el nivel más bajo de digitalización de todo el país y no tiene referentes de líderes digitales en el agro", afirmó.
Por último, resaltó que los consumidores deberían poder saber de dónde proviene su alimento a través de algún código de seguimiento, finalizando con palabras clave para que pueda continuar Hagelstrom, de IBM.
Hagelstrom insertó el eje del blockchain como "la nueva operación de un sistema de confianza", explicando que una vez que una transacción queda grabada en el sistema no se puede modificar, de modo que "mitiga la falta de confianza". Como ejemplo, mencionó el transporte o la entrega de mercadería. Esa base de datos está replicada por cada uno de los participantes de una red de negocios.
De este modo, contó que Wallmart e IBM iniciaron un sistema de trazabilidad hace más de dos años, cuyos números reflejaron que de una tardanza de una semana para recuperar la trazabilidad, diseñaron un sistema que contempla ejes claves en una red, donde obtuvieron la trazabilidad en 2,2 segundos.
"Esto garantiza mucha más seguridad y repara la pérdida de confianza en caso de que haya un problema con el consumidor", explicó y ejemplificó el caso de un alimento en mal estado.
Además, de manera similar a Becco, destacó que es importante "darle información al consumidor final". Mencionó que Carrefour ya viene trabajando en un proceso de brindar información a través de un código QR sobre sus pollos sin tratamientos antibióticos.
Finalmente, señaló la importancia de darle seguimiento a los contenedores y la digitalización de la información, todo en el mismo carácter de sumar confiabilidad, velocidad y seguridad a la cadena productiva.
El último orador del panel fue Baldunciel, referente de Aapresid, quien hizo referencia a la "cuarta revolución", que es la tecnológica. Consideró que en ella será clave la bioeconomía, que implica lo sostenible, y las agtech, que aportan nuevas herramientas al agro.
Al igual que en el acto de presentación, destacó que en el país "el 92% de la siembra actual es siembra directa" y que esa es "una ventaja comparativa con competidores de la región".
A través de los números de la Bolsa de Comercio, informó que Argentina representa el 3% de las exportaciones agroindustriales y se ubica en el lugar nº 11 a nivel mundial. Sin embargo, destacó que el país es el primer exportador de harina de soja, de aceite de soja, de aceite de girasol. El quinto exportador de carne vacuna, de trigo; el segundo exportador de maní, de maíz y el primero de biodiesel.
Razones por las cuales apuntó que "producimos materias de primas de bajo valor que son transformadas en alimento en otros países".
Y sentenció que el desafío, entonces, es "repensar los procesos de negocios y dejar de entregar commodities".
"Tenemos el modelo más sustentable de todos y tenemos que empezar a contarlo", dijo y agregó: "Tenemos que empezar a pensar en alimentar a 800 millones de consumidores y convertir nuestros campos en pequeñas empresas alimenticias".
Finalmente, destacó la importancia de comenzar a inmutar datos porque es "la oportunidad histórica de recuperar la reputación" y agregó: "Hay buen trabajo y sustentabilidad, se lo podemos contar a los consumidores a través de la tecnología".